Un inusual técnico en frenos de automóviles
Por el viaje que vamos a hacer por la ruta 40, cambié las cubiertas e hice la alineación y el balanceo de las mismas.
Por el viaje que vamos a hacer por la ruta 40, cambié las cubiertas e hice la alineación y el balanceo de las mismas.
Luego de unos días, comenzó a sentirse un suave silbido con cada giro de la ruedas. Esto se notaba solo andando por calles silenciosas y con la ventanilla abierta. Sospeché que una de las pastillas o bien el disco de freno, tocaba en algún lado, razón por lo que lo llevé al taller llamado: "Al Freno, Freno". Soy cliente de ellos desde hace años.
El técnico escuchó mi problema y efectuó un interrogatorio dirigido al silbido:
A) Sonoridad (reproducción onomatopéyica del ruido)
1) Intensidad
2) Tono
3) Musicalidad
Es bueno que sepan que en las clases de música de la escuela secundaria (Colegio Roca de Belgrano, donde también concurría Alex y él bien debe acordarse del aula de música) me dejaban fuera del aula por inservible para esos menesteres)
B) Luego de esta actuación, que por la cara del técnico, mi performance no fue convincente, enfocó su atención en la Cinética del ruido (relación ruido velocidad)
1) Si cuando iba rápido
2) Si cuando despacio
3) En ambas situaciones (respuesta correcta)
C) Características del paso del tiempo (cronoterapia) cuando hacia el zumbido)
1) Siempre (respuesta correcta)
2) Intermitentemente
3) Ocasionalmente
D) Características físicas de los elementos mordientes (Ruido en relación al accionar la pastilla de freno)
d1) Aumenta
d2) Disminuye
d3) No influye (respuesta correcta)
E) Características de la termodinámica (ruido en relación a la temperatura del vehículo por efecto de su combustión y/o fricción de metales varios)
1) Ruido en en caliente
2) Ruido en frío
3) Ruido siempre (respuesta correcta del múltiple choice)
F) Fatiga de materiales (Características por envejecimiento, mal uso, material defectuoso de origen)
1) Cuantos kilómetros tenía el coche recorrido (Sesenta mil kilómetros)
2) Cuando cambié las pastillas delanteras (las cambié a los 40.000 KM )
3) No preguntó sobre las cintas traseras.
G) Desgaste por uso inadecuado
1) Si en el estacionamiento nocturno dejaba el freno de mano accionado (no tengo claro cuántas veces lo hago)
H) Pregunta sin motivo aparente para mi nula sabiduría sobre el tema
¿Cambió cubiertas recientemente?
Luego de este exhaustivo interrogatorio, que más bien quisiera uno lo efectuara un médico de guardia, sobre todo cuando concurre con ruidos más intensos, más agudos, graves y sin intermitencias, efectuó un diagnóstico presuntivo en base al interrogatorio:
- ¡NO SON LO FRENOS!
- Por qué? - Pregunté. A lo cual contestó:
- El ruido del freno no se modifica según la velocidad.
En Referencia al punto B
- Si no se modifica el ruido al apretar el freno, es difícil que sean los frenos
En referencia a D:
- Los frenos traseros son cintas que no se gastan hasta los 1000.000 kilómetros
- Los delanteros son pastillas que por lo menos duran 40.000 kilómetros y usted las cambio hace 20.000 kilómetros .
En Referencia a F)
- Si queda todas noches con el freno de mano puesto puede empastar las cintas y al usarse cae un polvillo que al tener por donde evacuarse produce un roce que causa un pequeño zumbido que no tiene importancia.
En Referencia a G).
No entendí o no le dí bola a lo que decía de los puntos A; B; C; E y H
Aunque soy consciente que si los médicos no hacemos diagnóstico por interrogatorio las chances del diagnóstico por exámenes complementarios, se reducen al 10 %.
Descreí de su terminante diagnóstico y le dije si no tenía algún aparato que midiera los frenos. Dijo:
- Si usted quiere
Puso las ruedas delanteras del coche sobre unos rodillos y las hizo girar rápidamente, luego lo mismo a las ruedas traseras y dijo:
- Al girar no hacen ruido, las pastillas ni los discos tienen roce.
Bajando mi arrogancia le supliqué:
- En unos días voy a hacer un viaje a la Patagonia ¿Usted no sabrá algo más que de frenos y por ahí me dice lo que puede tener?
- Bueno deje que le dé una vueltita manzana
Con alegría le entregué las llaves.
A los 2 minutos vuelve, baja la ventanilla y me dice:
- Es que le pusieron cubiertas nuevas y no le pusieron grasa al talón entonces, frota con la llanta y cada vez que pisa el suelo silba por el frote.
(Este es el punto H del interrogatorio) y agregó como si nada:
- Es la goma delantera izquierda.
Pensé, en estos tiempos que una neumonía se diagnostica por resonancia magnética, más de un médico quisiera tener ese oído. Como no quería que se entere que soy médico, le dije algo socarrón:
- Con ese oído podría ser músico.
Aún desconfiando en el diagnóstico, remató la escena con un:
- Si quiere se lo soluciono.
- Si, si –respondí
Sacó la cubierta, embadurnó el talón de grasa la colocó y me dijo:
- Ya está.
Le pregunte:
- ¿Cuánto es?
- Antes de pagar vaya a probarlo.
Di varias vueltas manzanas con la ventanilla abierta, la radio y el aire apagado y por las calles más silenciosas. Resultó un silencio celestial.
Ya tranquilo porque mi querido Focus se había curado, pude entender que el técnico sabía de qué patología se trataba, antes de probar el coche y aún antes de ponerlo en los rodillos. Eso obviamente implica la terapéutica adecuada. Acertó como cuando acertamos los médicos en la primera consulta: en el 90% de los casos por los oídos, el habla, los ojos, el tacto y el olfato. Estos en sentido amplio
Volví al taller y le dije:
- ¡Lo felicito! ¿Cuánto le debo? Me respondió:
- Nada, es una pavada.
- Le debo más de lo que usted cree, así que acepte una propina.
- Bueno.
Le dí $80, bastante poco. Y me dijo:
- Gracias.
Cuando volvía pensé “ni siquiera sé cómo se llama”
Esto ocurrió ayer y lo tenía guardado en el fondo del ropero de las cajitas de los recuerdos. Con un mail de Alex, en cuanto al arreglo de los coches, me afloró este relato. Tampoco lo había analizado mucho más que “ni siquiera se su nombre” cuando en realidad, un desconocido y sencillo hombre me dio una lección sin él saberlo. Sin grandilocuencias y como lo más natural del mundo. Con toda razón podría haberme dicho (tema de Fito Páez) “quien dijo que todo está perdido (Marcelo), yo vengo a ofrecerte mi corazón” Pero en su sencillez dijo “no es nada” que en realidad es todo.
Marcelo
